Especial : Qin Kai, clavadista de la “era”

08-05-2016 13:54

Reportaje especial : Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016

En la historia del clavados en China son varios los deportistas que han establecido una hegemonía tal que ha marcado una era, tal es el caso de Gao Min, Fu Mingxia, Guo Jingjing, todas multimedallistas doradas en más de una edición olímpica.

Qin Kai, clavadista aún activo a sus 30 años de edad, no ha corrido con igual suerte a pesar de exhibir un palmarés en citas estivales que muchos envidiarían: dos oros, una plata y un bronce.

La “era” de Qin Kai

La “era” de Qin Kai

Qin llegó a la selección nacional en 1998 y en 2006 debutó en el escenario internacional.

Por la flamante colección de títulos que exhibe, siete de ellos en mundiales, Qin Kai es considerado un veterano sumamente valioso en la potente escuadra de China que este verano saltará a la piscina en Río de Janeiro en busca de barrer con los 8 metales áureos en disputa.

En los Juegos Olímpicos de Londres 2012, tras ganar la medalla de oro en el trampolín sincronizado tres metros, Qin Kai se enfrentó al saltador ruso Ilia Zajárov en la categoría individual.

"Muy bien. Esta noche, Qin Kai ha tenido una excelente actuación. Ahora le toca a Zajárov. Muy bien, perfecto. Qin Kai ha realizado seis saltos magníficos. Un salto impecable de Zajárov y Qin Kai hace un gesto de frustración."

Qin Kai, bicampeón olímpico, dice: "Cuando acabó la última ronda y vi la medalla de plata, me pregunté si seguiría practicando el deporte. Vi pasar por mi cabeza toda mi carrera como si fuera una película. Fue un momento muy duro y no pude contener las lágrimas. ¿Cómo explicarlo? El fracaso también es bueno porque te da experiencia de vida."

Qin Gang, padre de Qin Kai, dice: "La medalla de plata es muy valiosa también. Esta es la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de Londres y, por supuesto, su valor es mayor. Pero ésta es la medalla de oro de los Juegos de Beijing, hecha de oro y jade."

En su natal Xi´an, los padres de Qin Kai atesoran en una vitrina todos los lauros conquistados por su hijo -14 medallas de oro en dos Juegos Olímpicos, 6 campeonatos mundiales y 5 copas del mundo.

La “era” de Qin Kai

La “era” de Qin Kai

Además, Qin Kai es el único clavadista hasta la fecha que se ha coronado en los saltos sincronizados en nueve competiciones mundiales consecutivas. Su participación en los Juegos Olímpicos de Río, debido a sus tres décadas de vida, fue un dilema para toda la familia.

Qin Gang
dice: "Es bicampeón olímpico y todavía quiere seguir luchando. Espero que pueda mantener el entusiasmo."

Qin Kai dice: "Al fin y al cabo tengo un sueño olímpico al que no renunciaré por nada en este mundo."

Tras decidir que seguiría compitiendo, Qin Kai se incorporó al intenso programa de entrenamiento del equipo nacional. No había privilegios para ninguno de sus integrantes. 

Qin Kai tendría que hacer frente tanto al almanaque como al rigor del entrenamiento. Así que no tuvo más opción que concentrarse en su preparación.

Qin dice: "De 2008 a 2012, con veinte y tantos años, mi agilidad era la envidia de todos. Pero a partir de 2012, fui yo quien empezó a sentir envidia de los demás. Aunque estaba dispuesto a enfrentarme a las dificultades, la realidad resultó más dura de lo que había imaginado. Pero soy tenaz y perseverante por naturaleza y lucho hasta el final."

En plena olimpiada, ocurrió lo imprevisto. Qin Kai se fracturó una mano en vísperas de la Copa Mundial de 2014. El clavadista insistió en seguir entrenando con la selección pero no pudo hacer el equipo al evento del orbe y tuvo que volver a casa para la rehabilitación.

Qin dice: "Fue un dolor enorme. Primero, la gran altura del salto, y luego, el impacto al entrar al agua. Ahora me admiro a mí mismo por el valor que tuve".

Zhao Manli, madre de Qin Kai, dice: "Claro que sufrí mucho por su accidente. Volvió a casa con la mano todavía hinchada. Pero mi hijo, aguantando el dolor, me dijo que no pasaba nada, que me tranquilizara. Le pregunté qué iba a hacer y dijo que seguiría entrenando."

Qin dice: "En casa me sentía bastante relajado. Mis padres me animaban y me transmitían mucha tranquilidad y seguridad."

La “era” de Qin Kai

La “era” de Qin Kai

Qin Gang dice: "Un hombre debe ser capaz de asumir el fracaso, algo que ocurre muy a menudo en nuestra vida."

La familia le dio toda la fuerza que necesitaba para salir adelante. Tras perderse la Copa Mundial, el Campeonato Nacional y los Juegos Asiáticos de 2014, en 2015 se reincorporó al equipo pletórico de energía.

Qin Kai y el jovencito Cao Yuan formaron pareja en los saltos sincronizados. Su meta, reservar el billete a los Juegos Olímpicos de Río. En el Campeonato Mundial celebrado en Kazán, el dúo consiguió una trabajada victoria frente a rivales muy fuertes, que les dio la clasificación a la cita olímpica de este verano.

El triunfo supuso también la décima presea dorada de Qin Kai en saltos sincronizado en certámenes mundialistas en 10 años de carrera. El no haber sido capaz aún de rubricar su propia era, pese a su envidiable palmarés, no le quita el sueño a Qin Kai.

Hu Wei, entrenador de Qin Kai, dice: "Para mí, Qin Kai es un milagro. Obviando la Copa Mundial de 2014, a la que no asistió, nunca le han arrebatado la medalla de oro en el trampolín sincronizado."

Zhou Jihong, directora del Equipo Nacional del Salto de China, dice: "El nivel que ha mantenido en el trampolín es incomparablemente alto, por lo que podemos definir esta década como la “era de Qin Kai."

En este 2016, cuando se cumplen 18 años de su llegada al combinado nacional chino, Qin Kai se embarca en su tercera gesta olímpica en la que lo apostará todo al ascenso al Olimpo.

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Editor:Yin Qi | Fuente:CCTV.com
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